El mentoring que realizo implica una relación personal.

Tengo que conocerte bien para poder guiarte por el camino adecuado. Tengo que descubrir tus debilidades y fortalezas mentales para que explotes al máximo estas últimas. Te ayudaré a relacionarte correctamente en tu profesión y te contaré algunas cosas que debes evitar. Te voy a mostrar ese sinuoso camino que aumentará tus probabilidades de triunfar profesionalmente. Pon atención a mis palabras porque vas a descubrir muchas cosas nuevas.

 Tengo una metodología de trabajo cuyas bases son siempre las mismas pero se aplican de diferente manera para cada persona. En esta metodología vas a recibir todo lo mejor de mis conocimientos y experiencia que he acumulado a lo largo de todos estos años.

¿Por qué tengo una metodología de trabajo? Responder a esta pregunta es algo sencillo.

A lo largo de mi carrera se han repetido una serie de patrones que marcan el camino que hay que seguir para que se den las circunstancias favorables para tener éxito. Sin embargo, la aplicación de esos patrones es algo totalmente que varía de una persona a otra.

Las mujeres lo tenemos más difícil, pero para mí es un reto que me motiva mucho más.

Mi metodología varía ligeramente si eres una mujer. Todos los patrones que vas a obtener indican claramente cómo aprovechar tus fortalezas personales. La relación profesional que mantienes como mujer cambia mucho cuando empiezas a alcanzar ese techo de cristal. Es aquí cuando debes aplicar tus fortalezas siguiendo mis patrones.

No vas a encontrar ninguna plantilla con consejos. En mí vas a encontrar formación y metodología. Ese es el camino. Los patrones que propongo son solo eso, guías que marcan una línea que que varían enormemente de una persona a otra. Por eso necesito conocerte bien. Necesito exprimirte al máximo para que te sientas autorrealizada.